Por Sin Reservas
El premeditado, frío y alevoso asesinato de la adolescente Nairobi Montés, de 15 años de edad, fue registrado gracias a una cámara de seguridad, que sólo sirvió para apresar al criminal, pero no pudo prevenir lo que estaba sucediendo.
Cuenta el padre de la víctima, que el asesino de 16 años de edad, fue tan malvado que a sabiendas de haber ahogado a la joven, le pregunta a su hermanita por ella, o sea que es un sujeto del diablo que no merece estar ocupando un lugar en el espacio, lo mínimo que este frío asesino merece es que lo fusilen.
El maldito delata el vídeo toma la joven, la abraza y la lanza al agua, y observa como esta lucha por su vida, mientras toma un niño que camina alrededor y se lanza con él al agua, con la intención de distraer a los presentes, pero una señora socorre el niño y se lo quita.
En ese lapso de tiempo la víctima logra arribar a la orilla, pero el criminal la vuelva a empujar, se le coloca encima y la hunde hasta asesinarla definitavamente, entonces sale de la piscina y es ahí cuando friamente le pregunta a la hermanita por ella.
Pero esta cosa (que no identifican por la jodía razones legales) fue más lejos, intervino en la búsqueda y rescate del cadáver, con una actitud de ayuda inaudita y se larga del lugar con tranquilidad que enmudece.
El hecho ocurrió a principio de este mes, en Villa Linda, del sector Palmarejo, en Santo Domingo Oeste, pero no fue sino hasta hoy cuando se dio a conocer.
Estos horrorosos actos no merecen cadena perpectua, ni ninguna otra pena. Cuando este tipo de demonios no toman la decisión ellos mismos deben ser eliminados ipso facto.
